La primera mención conocida de la iglesia de Cucugnan data de 1360. El edificio está dedicado a Saint Julien et Sainte Basilisse, dos santos orientales. Este hecho hace suponer la antigüedad de su implantación religiosa. Hasta el siglo XIX, la iglesia se encontraba en la parte alta de Cucugnan, en el emplazamiento del antiguo castillo conocido como castrum, actualmente desaparecido. Ese edificio estaba aislado y a la intemperie, lo que provocaba que los oficios fueran peligrosos para los feligreses en épocas de lluvia y mucho viento. Hacia 1860 fue traslada y reconstruida en su emplazamiento actual. 

La iglesia de Cucugnan destaca por su campanario. En su interior, la decoración es simple acorde con la sobriedad del lugar. Su única nave, de estilo neogótico, se complementa con un coro y dos capillas situadas en el transepto. Dichas capillas albergan un conjunto de estatuas de madera del sigle XVII, una de ellas es Sainte Agathe, patrona de Cucugnan.

La capilla sud, situada a la derecha del altar, alberga una estatua que representa la Virgen embarazada, imagen bastante rara y un poco desconocida. La escultura es de madera policromada y dorada que data del siglo XVII. La originalidad de esta representación llama la atención de los visitantes ya que fueron prohibidas en el Concilio de Trento en el siglo XVI. Actualmente, se puede visitar una exposición sobre «Las Vírgenes en Francia» en el interior de la iglesia.

La iglesia de Cucugnan está abierta todos los días durante los horarios de apertura del Espace Audiovisuel Achille Mir.